Tipos de calderas gas natural
Antes que nada debe quedar bien claro el concepto de una caldera, cuya definición básica puede ser aquel artefacto que mediante un proceso de combustión de algún carburante genera energía calórica para ser distribuida por un sistema de ductos especiales, a nivel doméstico es el aparato que representa el corazón de un sistema de gas generalmente, en ese caso calderas gas natural distribuyen la energía que producen para agua sanitaria caliente, calefacción y cocinas
División según el combustible que utilizan
1.- Calderas a gas: se pueden dividir a su vez en dos módulos, aquellas que utilizan gas natural, siendo el sistema más fiable y con la menor emisión de gases, por lo tanto, es la energía más limpia, estas calderas deben revisarse una vez al año preferiblemente antes de la llegada del invierno para asegurar su funcionamiento.
Por otro lado están la de gas propano o butano, que son más contaminantes y suelen utilizarse en residencias que no requieren calefacción o en casas de alquiler.
2.- Calderas de gasoil: son aquellas que se utilizan en viviendas a las que no les llega un servicio canalizado de gas, por lo que se tiene que almacenar el combustible, en este caso el gasoil en su propio recipiente, requiere de un espacio determinado y son las que mayor cantidad de gases emiten.
División según su tipología
1.- Atmosféricas: prohibidas desde el 2010, eran calderas que utilizaban el aire propio del lugar de instalación para hacer la combustión requerida, por tanto, la emisión de gases tóxicos será muy elevada, además de ser un sistema riesgoso.
2.- Estancas: Actualmente son las que se pueden comercializar en el mercado, son estancas debido a que el proceso de combustión ocurre en una cámara completamente sellada, la salida de los gases en estos casos ocurre por un sistema de tiro del ducto instalado para tal fin.
Dentro de su categoría se encuentran las convencionales, estando prohibidas también por su baja eficiencia, las de bajo NOX, que emiten niveles muy bajos de dióxido de carbono y las de condensación, que sin lugar a dudas es la mejor opción en cuanto a eficiencia y seguridad.